Tipos de Cuys y cuidado.

 

¡Hola!

En esta ocasión vengo a platicarles un poco más acerca de los tipos de cuys y algunos cuidados un poco detallados sobre su higiene, esperando que la información que comparto les pueda ayudar o ser de utilidad para sus hijos cuys, sin más que agregar continuemos.

Usualmente cuando pensamos en cuy, pensamos en el típico cuy, que dé tiene el pelo lacio, pequeño y regordete, pero déjame decirte que hay toda una variedad muy interesante sobre los cuys.

Mi cuy es peruano, este cuy está alrededor de todo México de una manera más desarrollada que cualquier otro tipo de cuy. Los cuys normalmente viven de 4-5 años en cautiverio, si tu cuy, vive mas que ese tiempo ten por seguro que esta super bien cuidado. Además de la alimentación variada que mencionamos en el articulo anterior, debes de tener en cuenta la higiene de tu cuy, que es parte fundamental para prevenir parásitos no queridos en ellos. Los cuys normalmente se duchan de 15 días a un mes sin mojarles las orejas y los ojos, ya que esto les podría asustar y crear algún trauma con el agua que realmente no queremos que suceda en ningún momento. Además no esta de más cepillarle su pelaje con frecuencia, algo que la haga sentirse cómoda y acostumbrada al tacto, ya que sentirse sola, provocará que se estrese y tenga algunas complicaciones en su salud.

Tiempo después de que tuve mi cuy, al ir al veterinario los días en los que le tocaba baño o alguna revisión, me he encontrado con otro tipo de cuy, muy esponjado y despeinado, quedé fascinada, se llama Cuy abisinio o sheltie estos cuys, son el 30% de la población desarrollada de cuys en México.

Después de darme la tarea a investigar aún más tipos de cuys me encontré con el cuy skinny, que es un cuy completamente calvo, con la piel al descubierto, que básicamente es para personas que tienen alguna alergia, este cuy actualmente solo cuenta con el 5% de población desarrollada en México, ya que algunas personas consideran estéticamente raro a esta raza de cuy, pero yo considero que siguen estando muy tiernos.

 

Nos vamos ahora de lleno con los cuys Teddy, que son cuys que están más regordetes de la cara, pero siguen siendo cuy, muy lindos todos los cuys me parecen una raza de roedores muy adorables. 

Retomando a los cuys peruanos, son cuys de un tamaño mediano a comparación a los demás cuys, crecerá tanto como le des buena alimentación aunque no pasará el tamaño de un conejo mediano o un perro pequeño, en dado caso, es recomendable cambiar su alimentación y dejarle que haga actividad física en su área de estancia o descanso. Estos cuys pueden diferenciarse por contar con una semi joroba pequeña en su espalda, no les afecta en nada sin embargo puede ser más notoria en machos, que en hembras. Comúnmente los cuys son bastante sociables si desde pequeños les acostumbras al tacto humano, yo cuidaba mucho a mi cuy ya que tenía sobrinos pequeños pero luego comprendí que en cuanto le dieran un agarre cuidadoso, no había problema alguno así que la deje socializar y ahora grita por atención. 

Alimentación adecuada para cuys

 

El alimento de los cuyos es la parte fundamental al momento de ser una madre primeriza de cuyos, tener en cuenta el bienestar de ellos ya que el alimento qué es difícil de procesar los hará tener malestares estomacales y de sistema digestivo. En el primer momento en el cual adquirí mi cuyo; la persona de la tienda veterinaria me recomendó darle conejina (alimento para conejos procesado) diario, por defecto yo le hice caso, no fue hasta tres días después que note que sus eses estaban muy duras y le costaba digerirlas, me asuste y comencé la búsqueda hasta llegar a un familiar que ya estaba familiarizado con los cuyos. Me dijeron que comer el mismo alimento la haría que tuviera problemas digestivos como ya los están comenzando a tener, hice una ardua investigación sobre lo que necesitaba mi cuyo y pide notar que la lechuga era benéfica para su digestión indague más sobre un libro que encontré y pude comprobar que los alimentos ricos en vitamina C cómo los son los pimientos amarillos y rojos, la lechuga, pepino, apio, perejil, manzana, ejotes, chicharos (semitriturados para evitar asfixia) sandia (una vez por semana porque es muy dulce y puede provocar aumento de glucosa y muerte por semillas) plátano (una vez por semana) Y dejar de lado la conejina a 30 gramos por semana únicamente. Cómo mi cuyo tenía la edad de 1 mes cuando llegó a mí, era muy pequeña y no podía morder cosas muy duras entonces yo le partía el cóctel de su comida de manera que pudiera comer mejor. Sus comidas se las divido en una ración por la mañana y una ración por la noche.

Vario sus dietas para que no coma lo mismo todos los días y justo entre miércoles y jueves le doy conejina para que la proteína que le aporta la misma pueda comerla de manera sistemática en dos días de la semana.

Intentar también no abusar de la comida que es rica en agua como lo es el pepino, lechuga y cilantro ya que estos harán que tú cuyo baje de peso o no tenga las vitaminas necesarias para su cuerpo, Además las cáscaras de algunas frutas no tan blandas como la cáscara de melón, sandía y naranja ayudarán a qué los dientes de tú cuyo se desgasten y no crezcan más de lo adecuado para su tamaño, en alguna ocasión recuerdo haberle puesto un trozo de madera por recomendación de su veterinario pero ella destrozó por completo el madero y me asustaba que pudiera tener alguna astilla así que opte por una solución rápida y sencilla.

Balancear la alimentación de un cuyo no es fácil ya que ellos siguen comiendo aun cuando ya están satisfechos o cuando ya tuvieron lo necesario, esto lo aprendí cuando aun le dejaba la conejina en su jaula, ya que comía y no paraba hasta terminar aun cuando le había puesto lo suficiente para todo su día. Entonces como recomendación, solo deja el alimento que comerá por el día y por la noche en las horas exactas para que aprenda a comer, así evitas que este llorando o quejándose. Sabrás cuando le estes dando demasiada comida a tu cuya una vez que la piel bajo su boca comience a colgar, además recuerda pesarlo mes con mes.

Enfermedades de cuyos ¿Cómo detectar a tiempo?

 

¡Hola! En esta segunda actualización contemplaremos un problema común y una preocupación al tener un nuevo miembro de familia como lo son los cuys; en algunas ocasiones tener un cuy por primera vez no suele dar problemas, pero por más cuidados que les demos, habrá situaciones que nos preocupen y no sabremos cómo manejar.

Cuando mi cuy cumplió tres meses conmigo, le había dado tres baños, y en el último de ellos note una coloración inusual detrás de su oreja derecha, me preocupe aunque sentí que tal vez era una irritación por el jabón de cuys, por lo que decidí suspender y enjuagarle bien, para evitar más enrojecimientos de este tipo, decidí ponerle pasta lazar, que suele usarse en quemaduras e irritaciones, con un poco, le mire bien y cómoda, aunque tenía en mente su irritación, cometí la irresponsabilidad de no revisarle si en alguna otra de parte de su cuerpo tenía algún otro enrojecimiento; ahora me arrepiento.

Al cabo de dos días la tenía recostada en mis piernas boca arriba, ya que le gusta recostarse de esa manera cuando está relajada, le miré su pata inferior derecha y tenía una irritación que ya parecía una quemadura, me asusté porque al parecer ya se estaba rascando y se había lastimado, comencé a revisarla y al parecer tenía más de estás mismas heridas, mi primer pensamiento fue que tal vez tenía un parásito externo; como una pulga o una chinche, pero al cepillarle no salió absolutamente nada. Me dispuse a llevarla al veterinario al tercer día por la mañana, la veterinaria al revisarla prefirió dejarla en observación por varias opciones que podrían haber causado las heridas o quemaduras, por la tarde del mismo día le lleve el jabón que utilice pero la veterinaria ya había caído en cuenta, que efectivamente el jabón que yo le había aplicado a mi cuy, por esta ocasión le habría irritado y razón por la cual su cuerpo estaba reaccionando al jabón, suele ocurrir aunque no tan a menudo. Me recomendó un nuevo jabón y bañarla de 3 a 4 semanas para ver mejorías, por supuesto que le aplicó cremas para curar sus heridas y estás sanaron. Es súper importante revisar a nuestros cuys de manera constante, conoce tu mascota, su color y tamaño en normalidad, para cuando le estés revisando de manera usual puedas notar a tiempo cualquier cosa inusual, esto podría salvarte de un mal rato y evitar que tú cuy se sienta incómodo de alguna manera o pueda llegar a sufrir, cada que le des horas de atención a tu cuy, puedes revisar detrás de sus orejas o patitas, o por dónde sobre notes su piel libre de pelo, sequedad, enrojecimientos o secreciones que puedan salir de sus orejas o boca, esto puede ser consecuencia de alguna infección tal vez por comida o elementos externos a cuys.

Además de estar al pendiente de sus heces, aunque son pequeñas, siempre son del mismo tamaño y color, ya que su organismo tiene un sistema digestivo sistemático por lo que siempre sus heces serán del mismo tamaño y consistencia si tú cuy está sano, al notar algún cambio en las mismas puede ser a causa de su alimento, o su agua, los cuys suelen beber mucha agua pero al mismo tiempo se sienten cómodos tirando sus heces al agua por "accidente" razón por la cual debes estar cambiando constantemente el agua para que puedan beber agua limpia y no contaminada por sus heces o por alimento que caiga en la misma, también puedes optar por bebederos de chupón aunque esto los hará más flojos para beber agua, ya que deben hacer esfuerzo para girar la esfera de estos bebederos.

En otra ocasión después de meses de tener a mi cuy, comencé a ver qué no caminaba de una manera recta, si no en diagonal pero no en una manera normal, se desviaba sin querer, como si estuviera distraída, creía en ese momento que su comportamiento se debía a los objetos que estaban cerca de ella; luego de observar un rato mas y hacer pruebas caí en cuenta que no le gustaba el olor de mi perfume e inconscientemente su cuerpo la alejaba de mí, aunque creo que esta es una historia mas para contar en alguna otra ocasión.

Bienvenida

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¡Hola! Bienvenido seas al mundo de Cuys, mi nombre es Litzy, tengo 21 años, amante de los animales pero en especial de los Cuyos, Cobayas, Cuys. Este blog tratará un poco de todo relacionado a los Cuyos, su salud, sus cuidados, sus espacios, sus enfermedades, sus pasatiempos y sus comidas, entre más cosas que igual me podrías preguntar o sugerir. La razón por la que he decidido armar este pequeño blog es en función de que sé que ser mamá o papá de un cuy por primera vez, suele ser bastante complicado cuando no tienes una idea de que hacer o cómo hacerlo. Ya que es bien sabido que una de las principales responsabilidades y aprendizajes al tener una mascota es tener bien en claro que no es un juguete, y que su vida depende prácticamente de ti y de la atención que le pongas, ya que no tienen conciencia propia sobre la vida, es como un bebé que crecerá, solo que los animales jamás madurarán en razón de su mentalidad. Con tantas preocupaciones por calmar y por tantas dudas que resolver me decidí a ir abordando temas basados en mi experiencia con mi cuy. Fue una aventura desconocida el decidir tener un cuy en casa, ya que con los miedos que tengo por los ratones y lo delicados que son, tenía miedo a perder a mi cuy o que las personas de mi casa no la aceptarán o trataran como a cualquier otra mascota, incluso llegué a pensar que le tendrían miedo por ser familia de los ratones.

Cuando mi cuy hembra, llamada “Cochinilla” llegó a mí, lo primero que hice fue buscar en internet cómo atenderla, qué darle de comer, cómo cuidarla y sostenerla también, ya que no quería lastimarla. Pero no encontré la información que realmente me fuera útil, por lo cual acudí a mi hermano, quién ya había tenido dos Cuy antes que yo, pero uno falleció por un mal agarré y fractura, el segundo Cuy estaba muy bien cuidado; por lo cual él me explicó que se les debe de dar ciertos cuidados especiales ya que son muy delicados por ser una raza pequeña.  Mi primera experiencia con mi cuy fue el que no me tuviera miedo, que se fuera acercando a mí por voluntad y para ello le fui acariciando su pequeña cabeza, aun con la delicadeza con la que estaba intentando hacerlo, la asusté, por lo cual procedió a orinarse encima de mí, ahí aprendí a hacerlo más despacio y sin tanta fuerza para no incomodarla. La segunda ocasión que le quise acariciar noté unos pequeños animalitos sobre su pelaje negro, mi reacción fue imaginar que eran pulgas o incluso pequeñas chinches, cuando la llevé al veterinario me dijeron que eran parásitos, que reposan en el pelaje del cuy, y cuando sienten una amenaza o estrés, suelen despertar por decirlo así, fue así como comprendí la mejor técnica para sostenerla sin que fuera a orinarse encima de mí y sin estresarla de su estado de reposo.